
Es muy raro en estos tiempos de tanta auto-promoción encontrar una figura así. Ivar Da Coll ha dado contadísimas entrevistas (aquí hay una de ellas) y por eso es de agradecer la iniciativa llevada a cabo en el año 2007 por la Biblioteca Nacional de Colombia de preparar una exposición conmemorativa y un libro donde especialistas (y amigos) revisan su obra. Esta publicación no sólo es un homenaje sino también una manera de contribuir a promocionar en su país y fuera de él la obra de alguien que ha conquistado a miles de lectores con sus encantadoras historias de animales autóctonos -como Chigüiro, ese ratón grande de los llanos orientales que los niños adoptan de inmediato como si se tratara de su osito de peluche-
En esta publicación se presentan textos de Beatriz Helena Robledo -una de sus mayores difusoras-, la editora venezolana María Elena Maggi, y Fanuel Hanán Díaz analizando en detalle la obra y el imaginario de Ivar Da Coll, y confirmando esas maravillosas relaciones artísticas que el ilustrador colombiano tiene con autores como Arnold Lobel o con el mundo del teatro, ya que él mismo fue titiritero desde su más tierna infancia.
María Clemencia Venegas habla del "encanto de la inocencia" que, en estos tiempos que corren, es algo a tener muy en cuenta. Los personajes de Da Coll están muy cercanos al mundo de los niños: sueñan, temen a la noche, son un poco traviesos, quieren a los amigos, olvidan un cumpleaños y guardan secretos. Margarita Valencia contribuye con su divertido texto a mostrar un Da Coll primerizo. Ella es la hija del valioso editor Carlos Valencia (¡yo todavía tengo mi ejemplar de Tengo miedo en esta editorial!) y relata unas cuantas anécdotas sin desperdicio. Se completa este libro con una detallada cronología, y una abundante bibliografía. El volumen, para los que no pueden solicitarlo a Colombia, puede descargarse en pdf aquí , y ha sido el primero de una serie que pretende con mucho acierto rescatar autores y obras nacionales con la intención de darles amplia difusión. En esa serie acaba de aparecer un catálogo de otro singular escritor: Triunfo Arciniegas, y está recién salido de la imprenta uno dedicado a la ilustración.
Nos encanta la invasión de autores extranjeros y reconozco que siempre tengo que hacer un esfuerzo por buscar lo que se publica en lengua castellana entre tanta traducción. Si estos libros llegan acompañados de ayudas a la traducción y de grandes promociones estatales, ¿por qué no copiar este modelo para mostrar la calidad del trabajo de nuestros creadores? Esta iniciativa de la Biblioteca Nacional de Colombia me parece excelente para reflexionar sobre lo que políticas estatales pueden hacer para apoyar la obra de sus creadores.
hola
ResponderEliminarme gusto cuento de tengo miedo, porque yo tambien cuado estoy solo y veo peliculas feas, te manda saludar mi mami, soy de tuxtla gutierrez, y me encargo mi profe rosi
que te escribiera
podasdata ,,,,,
andre
hola
ResponderEliminarte quiero mucho